El 10 de febrero de 1814, José Félix Ribas dispone
de sus tropas en la Plaza Central, organizándola tácticamente en forma de
cuadrícula: los hombres más experimentados ocupan sitios más visibles, mientras
que los más jóvenes se atrincheran en improvisados muros y paredones, entre las
instalaciones de la iglesia y las casas circunvecinas, solo se esperaba la
acometida salvaje.
Luego, en la mañana del 12 de
Febrero de 1814 y en su esfuerzo por mantener viva la Segunda República el Ejército Republicano se prepara para la resistencia antes la
proximidad de José Tomas Boves comandada por Francisco Tomas Morales y sus
tropas con más de dos mil hombres provenientes de los Valles de Aragua, las cuales amenazaban con invadir la ciudad
de Caracas. La Victoria era
considerada un punto estratégico, José Félix Ribas, siendo nombrado por el Libertador, general de
División de los Ejércitos de Venezuela y con tan solo 1.500 hombres, entre ellos seminaristas y
estudiantes de la Universidad de Caracas (hoy UCV), se dirige a sus tropas en palabras que
quedarían para la historia: "Soldados, lo que tanto hemos deseado se realizará hoy. He ahí a Boves,
cinco veces superior a nosotros es el ejército que trae a combatirnos y aún me
parece poco para disputarnos La Victoria, vosotros defendéis del furor de los tiranos
el honor de vuestras esposas, la vida de vuestros hijos, el suelo de la patria. Mostradle vuestra
omnipotencia, en este día que ha de ser memorable no podremos optar entre
vencer o morir ¡necesario
es vencer! ¡VIVA LA REPÚBLICA!".
Al caer la tarde, la batalla aún no se había
decidido por ninguno de los dos bandos cuando ya las fuerzas atrincheradas de
los independentistas rayaba en la desesperación llega el refuerzo de Vicente
Campo Elías y Antonio Ricaurte con cuatrocientos hombres
de caballería provenientes de las afueras de San Mateo. José Felix Ribas, aprovechando esto, con sus cien mejores hombres, procedió a cubrir al
refuerzo y a romper la línea enemigas. No había lugar para los prisioneros y todo el
que caía en manos adversarias era ejecutado sin compasión. A las siete de la
noche, los realistas huyeron despavoridos en el desorden, Bolívar el 13 de
Febrero de 1814 al conocer la noticia designa a Ribas como "Vencedor de los Tiranos en
la Victoria".
Gracias a la lucha de
aquellos jóvenes que buscaban librar a la República del tirano opresor a
quien sus soldados llamaban sumisamente "Taita",
y a quien Bolívar se referia como: "… un hombre cruel que no parece haber sido amamantado con leche de mujer,
sino con las de los tigres y las furias del infierno". En el corazón de Boves
no había espacio para la compasión. Sin embargo, eso fue ningún
impedimento para que estos jóvenes salieran a la batalla a luchar por sus
ideales y ganar lo que luego fuera considerada como una de las Guerras de Independencia de
Venezuela y en honor a ello, el 10 de febrero de 1947 la Asamblea
Constituyente decretó celebrar cada aniversario de la batalla como el “Día de la Juventud.”
JOSE FELIX RIVAS ESTABA CASADO CON DOÑA JOSEFA PALACIOS, HERMANA DE DOÑA CONCEPCION PALACIOS MADRE DEL LIBERTADOR. A DOÑA JOSEFA , LE TOCO CUIDAR AL LIBERTADOR TRAS LA MUERTE DE SU MADRE. CUANDO J. F . RIVAS ES SACRIFICADO POR LOS REALISTAS, DOÑA JOSEFA SE ENCERRO POR VOLUNTAD PROPIA EN SU HABITACION PARA NO VER NI MANTENER CONTACTO CON NINGUN DESVASTADOR DE SU PAIS, SOLO MANTENIA CONTACTO CON SUS CRIADAS Y SU MEDICO.
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